Dos cosas que van juntas, festejos y brindis que me dejan con la garganta hecha polvo. Hablo demasiado, eso lo sabemos, además hablo mal, diría una locutora?
Cuántos millones en este mundo se habrán despertado hoy con la voz ronca de tanto charlar en algún festejo de fin de año?
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intentalo que podés!