lunes, 12 de septiembre de 2011

Toy frita

Estuve en el outlet de Paula cambiando un regalo del bebé. Miré cosas para mí, unas camisas lindas, largas como necesito para que no me dejen la panza al aire (no soporto más o menos a unas 10 camisas así en mi ropero, -obvio-, son de otras décadas). Pero no me compré nada.  Después fui a la perfumería y me compré  cremas (si, plural, dos) antiage-milagrosas, en cuotas, equivalentes a varias camisas del outlet de Paula.   Es que tengo el aliento de los 40 (años) sobre la nuca, está ahí nomás, ahí nomás...

1 comentario:

intentalo que podés!