sábado, 28 de julio de 2012

noches montevideanas

Llegamos ayer de tarde, como siempre con poco tiempo y muchas cosas que hacer. Aunque tengo familia acá, no tengo lugar para quedarme con toda mi prole. Cada viaje es la misma discusión con mi marido, yo quiero venir a un apart y él no, vamos a lo de mi madre, me dice. Y acá estamos una vez más, prisioneros en el living,durmiendo en los sofás, único reducto de la casa que parece normal, porque arriba se esconde toda la locura del sindrome de diógenes de esta familia. Si cruzo la puerta de vidrio que da al corredor que da a la escalera que da al baño en el subsuelo que está trancada porque da a la cocina trancada donde está encerrada la perra ... si cruzo la puerta es como entrar al país de narnia, todo congelado. Pero no sólo eso, acabo de intentar abrir la ducha y NO HAY AGUA CALIENTE!. Alguno de mis hijos tocó la llave del calefón, instrumento de tortura uruguayo que sirve para que te quedes con agua fría cuando tenés la cabeza llena de shampú. De la cómodidad de la noche el resultado es que mi marido se despertó 6.30 AM y acá estamos desayunando. Me dijo, mañana dormimos en un hotelito de camino a Buenos Aires. Es el problema con los optimistas, la falta de memoria. Por suerte con mi ansiedad anticipatoria yo ya estaba preparada para todo esto. Menos para el agua fría

5 comentarios:

  1. tuve buscar lo del síndrome de diógenes (no lo sabía) y no me gustó lo que encontré! igual ya alcanzaba con el resto de la descripción, tremendo! de por sí la incomodidad de ir a la casa de la suegra ya es bastante
    supongo que ahora que estás de vuelta, te toca descansar de las vacaciones...
    Cariños y besos!!

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  2. aaay sí, ya estamos de vuelta en el yugo de los horarios y las corridas, pero en cama y ducha propia, besos!

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  3. También tuve que buscar aquello del síndrome de Diógenes. Así que... bienvenida a la rutina!

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  4. Es verdá lo de los optimistas jeje, así sobrevivimos

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  5. hola Pau!! te viniste con todo a visitarme al bló,

    Calderón, vos recordarás mis historias suegrísticas,

    besos!!

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intentalo que podés!