Cascaritas de naranja con chocolate

Han sido la parte más dulce de este día en que todo salió mal: llegamos al Cerro Catedral y cerraron el teleférico por viento. Fuimos hasta el Cerro Viejo pero tampoco abre hasta julio. Intentamos hacer el tour por una fábrica de chocolate pero 45 min de visita guiada pueden volverse infinitos con dos (tres) piojitos enojados. Ah, además comimos en el lugar más feo de todo Bariloche y Mateo se hizo la caca más grande de los últimos años que traspasó hasta el equipo de nieve que nos trajeron de Paris cuando Andrés era bebe. Pero al menos logré tomarme un tecito en Rapa nui con muchas cascaritas de naranja. A eso de las 4 volvimos agotados a la cabaña calentita con vista al lago y hasta pude tomarme otro tecito leyendo el Salinger (nueve cuentos) que me traje, y todos se portaron bien por un rato. Y ahí me acordé que siempre soñé con estar en una casita calentita con linda vista en familia y leyendo tranquila. Al final no estuvo tan mal el día